Educación
Defender el derecho a una universidad para todos
Impedir el avance del ajuste contra la educación es parte de nuestra misión, centrada en construir comunidad derribando los flagelos de la pobreza, la discriminación y la desigualdad de oportunidades. Por Gustavo Naón.
Gustavo Naón
El Centenario de la Reforma nos encontró en pie de lucha a quienes estamos comprometidos con la educación gratuita y de calidad. Hace poco más de dos meses, en el actual marco de crisis económica y ajuste, salimos a la calle en una multitudinaria marcha que significó un claro mensaje en defensa de nuestra universidad pública.
El homenaje a los estudiantes cordobeses debe darse en clave de futuro. Tenemos la obligación de enfocarnos en afianzar las conquistas alcanzadas a lo largo de la historia del movimiento estudiantil en nuestro país.
La movilización que culminó con la toma del Rectorado de la Universidad Nacional de Córdoba, el 15 de junio de 1918, significó un hecho fundacional para la Educación Superior argentina y latinoamericana, porque derribó la estructura conservadora, elitista y anquilosada que sostenía la idea de una “universidad para pocos”. Es historia y es presente, porque las desigualdades que dieron origen a aquel movimiento se reproducen de manera dramática en nuestra realidad.
Así como la Reforma significó la llegada de los sectores medios a las casas de estudios, salvaguardar la Universidad Pública, en la actualidad, representa la consolidación de un derecho que nos enorgullece como sociedad ante el mundo.
Los principios reformistas plasmados en el Manifiesto Liminar, como el cogobierno, la libertad de cátedra, la autonomía y la participación, son las banderas que sentaron las bases para que tres décadas después se estableciera la gratuidad, y finalmente los hijos de los trabajadores accedieran a la Universidad. Debemos estar alertas para cuidar estos derechos adquiridos, como ya lo hemos hecho cada vez que algún gobierno intentó avanzar sobre ellos.
La Universidad Nacional de Lomas de Zamora, que se encamina hacia sus 50 años de vida, es la primera que se creó en el Conurbano. Nació con el objetivo de posibilitar el acceso de los hijos de los trabajadores a una institución de estudios superiores gratuitos y de excelencia académica.
En la actualidad, muchos de nuestros alumnos provienen de sectores postergados y son primera generación de universitarios de sus familias. Por eso, impedir el avance del ajuste contra la educación es parte de nuestra misión, centrada en construir comunidad derribando los flagelos de la pobreza, la discriminación y la desigualdad de oportunidades.
Interpretar la Reforma después de un siglo nos lleva a comprometernos, en lo personal y en lo institucional, con la defensa de la educación pública como herramienta de inclusión, motor del desarrollo y garantía de movilidad social para todo nuestro pueblo.
- Por Gustavo Naón / Decano de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad Nacional de Lomas de Zamora para Página/12-